El otro día quedé para ir al cine. Como siempre, llegué antes de tiempo, y mientras esperaba me dediqué a observar a quienes, como yo, también esperaban. Como llevaba cámara puedo compartir lo que observé.
Que cada cual extraiga sus propias conclusiones:











Más tiempo pasa y más se me mira como a un ovni mientras espero (o no) sentado en algún lugar público ya que escribo (en cuadernos) o leo. «Dime quien te llama y te iré quien eres»… comienzo a tener fuertes crisis de identidad. ¿Terminaré descubriendo que no existo?
Eso me pasa a mí… a veces ni siquiera leo. Y simplemente estoy y observo, sin cámara, aunque todo el mundo -ovnis- a mi alrededor hace algo, escucha o habla con un aparato, y tengo la impresión contraria ¿sólo existo yo? ¿no hay nadie más aquí y ahora?
Me han encantado las fotos, y su excusa. 🙂
Supongo que hace unos años habría ganado el porcentaje de cigarros sobre móviles. Pero es inquietante la compulsión a sacar el móvil y teclear (lo que sea) cuando estamos solos.
Es inquietante la inquitud que nos genera el estar solos, aunque sean unos minutos, -qué ansiedad- y la necesidad imperiosa de hacer algo que difumine esa consciencia. Y creo que ambién genera ansiedad el hecho de que se nos vea solos. Los móviles han sido un gran invento para llenar esos vacíos.
En realidad la proporción de personas tirando de móvil era mucho mayor, pero ya me parecía un exceso de fotografías. También había un fenómeno muy alarmante, el de aquellos que tiraban de móvil aún estando acompañados. Un beso, guapa.
Fructífera espera. E inquietante la constatación de que no sabemos, o no soportamos, quedarnos solos en medio de la gente esperando sin más, sin hacer nada… ¿será que no sabemos disfrutar el no hacer nada? ¿ o nos dará miedo la soledad? ¿o lo que los demás piensen si nos ven solos? ¿o nosotros mismos?… A saber. Un beso.
Hola, una preguntaaaaa, que modelo es tu cámara? la calidad de fotos me parece muy buena, espero me puedas responder. Gracias!
Es una Nikon D40. Pero el contraste está retocado. Un saludo.