Supongo que hoy es uno de esos días en los que uno se pregunta si hay algo que dure siempre, con la necesidad de encontrar un sí entre todo lo que cambia, que es todo. Incluso yo.
Con la necesidad de encontrar algo que, entre el cambio constante, esté quieto. Que esté quieto ahora, que vaya a estar quieto siempre. Signifique siempre lo que signifique. La eternidad, o mi vida.
Y con la necesidad de poder asirlo. Porque si por un momento pudiera hacerlo, desparecería el miedo.
Supongo que hoy es uno de esos días en los que uno se pregunta si hay algo que dure siempre con la necesidad de encontrarlo. Aún teniendo la certeza de que no existe.